Bruno Mars ha regresado a la escena musical con fuerza de la mano de Anderson Paak y Silk Sonic con la canción Leave The Door Open, un tema que ha causado sensación entre los seguidores del artista de origen hawaiano y que pudimos disfrutar en directo en la gala de los Grammy. Aprovechando su éxito y fama, un hombre ha suplantado la identidad del cantante en redes para contactar con una fan y estafarle nada menos que 200.000 dólares.
La historia parece de ficción pero ha ocurrido en una localidad de Texas, en Estados Unidos, según ha informado la CBS 11 News, aunque sin desvelar la identidad de la mujer estafada, a quien han llamado Jane.
Todo comenzó en el año 2018, cuando Jane lidiaba con la reciente pérdida de su marido. Las redes sociales se convirtieron en una de sus salvaciones, encontrando allí la compañía que mitigaba su sentimiento de tristeza y soledad gracias a conversaciones con personas de diversas partes del país.
Un día, recibió un mensaje con la conocida canción de Bruno Mars. Marry You. Cuando Jane indagó en su perfil, se dio cuenta de que tenía fotos del artista y de que su nombre era el mismo, con lo que dio por hecho que quien le había contactado era el cantante.
Poco a poco entablaron una amistad y Jane se fue abriendo, sincerándose sobre detalles de su vida y comentando cuál era su situación financiera, hasta que el supuesto Bruno Mars le pidió ayuda. Al parecer, había dejado sin pagar los coches que había estado utilizando durante su última gira y necesitaba urgentemente 5.000 dólares.
Jane le hizo llegar un cheque por la cantidad de 10.000 dólares pero, al parecer, aquello no fue suficiente para el estafador, quien le dijo que necesitaba más dinero para costear su gira. De esta manera, la mujer recuperó algunos de los depósitos que tenía y acabó enviándole 90.000 dólares más.
El falso Bruno Mars le dijo que estaba enamorado y hasta le propuso matrimonio, enviándole un anillo de compromiso. Por su parte, ella invirtió miles de dólares en montar un estudio de grabación en el garaje de su casa. Pero el día en que él se iba a presentar allí para recoger el dinero que necesitaba, fueron unos hombres quienes lo hicieron en su lugar. Le explicaron que el cantante había sido retenido por la policía y que no podía acudir a su cita. De hecho, hasta le enseñaron unas fotos retocadas con Photoshop para demostrarlo.
Lejos de sospechar que le estaban engañando, Jane les prestó 5.000 dólares más para combustible para su avión privado. Una vez se fueron, la mujer comenzó a sospechar que la historia no cuadraba y finalmente se dio cuenta de que le habían engañado.
“Me amenazaron con envenenarme y matarme si no les conseguía el dinero. Así es como llegó al final”, comenta ella sobre el momento en que les exigió que le devolvieran el dinero. Finalmente, el asunto acabó en manos de la policía local que encontró indicios de culpabilidad en dos ciudadanos nigerianos.
No obstante, y a pesar de la estafa sufrida, Jane es una gran seguidora de Bruno Mars. Tanto que no ha dudado en hacer la siguiente afirmación: “Si entrara en Instagram y dijera ‘oye, necesito ayuda’, yo lo ayudaría”.